El Arsenal ha sido una de las grandes revelaciones de la campaña en Europa a pesar de la debacle final protagonizada por el conjunto londinense, que finalizará en blanco el curso en cuanto a títulos, pero esto no ha evitado que Martin Odegaard haya revalorizado su valor de mercado de forma exponencial a lo largo de los últimos meses.
A pesar de que el mediapunta noruego fracasó de forma ostensible en su etapa en el Real Madrid, de la mano de Mikel Arteta se ha convertido en la gran referencia del Arsenal y en uno de los jugadores más desequilibrantes del mundo.
Fruto de ello, los gunners llevan varias semanas intentando extender su contrato para evitar que Odegaard se sienta tentado por la posibilidad de experimentar un nuevo cambio de aires en su carrera y, de forma sorprendente, el PSG ha irrumpido en escena dispuesto a hacer hueco en sus filas al talento noruego de 24 años. Nasser Al-Khelaïfi tiene especial necesidad por recomponer la espantada de Lionel Messi con un crack de talla mundial y, tras tantear a jugadores como Rafael Leao, Bernardo Silva o Mohamed Salah, Odegaard se ha convertido en su nueva obsesión, tal y como publica el diario Express.
Con Neymar y Kylian Mbappé posicionados nuevamente como las grandes referencias del equipo y los jugadores sobre los que depositar las esperanzas de lograr la primera Champions en la historia del PSG, Al-Khelaïfi pretende invertir una cantidad cercana a 100 millones para convencer al Arsenal y cerrar la incorporación de Odegaard, algo que sin duda supondrá uno de los grandes traspasos del mercado veraniego.
Aun así, el futbolista noruego será el que tenga la última palabra ya que, por muy atractiva que sea la posibilidad de jugar con Mbappé o Neymar, en el Arsenal está considerado una pieza capital y apostar por la vía del PSG podría no resultar tan gratificante a título individual debido a la abundancia de problemas vividos en el Parque de los Príncipes durante las últimas temporadas.
